viernes, 13 de febrero de 2009

integrar, divertirse

Integrar, es una palabra que ha sido de gran utilidad para mí y es en principio una palabra tecnica muy utilizada en el budismo por lo cual no puedo decir que es algo que yo haya inventado.
La palabra alude al hecho de ver las cosas desde una perspectiva más global de la que generalmente solemos hacer. este recurso sirve especialmente cuando el hecho es inevitable e irremediable, tal vez sin solución.
cuando un hecho es irremediable, de nada sirve ya el lamento, la cólera, el llanto, tal vez en un inicio sirva como una descarga comprensible. toda emoción debe tener su descarga, pero evocar la emoción pasado ya un tiempo o siendo el hecho irremediable como he sostenido, ya es pérdida de tiempo, un tiempo valioso para seguir asombrándonos con el fenomeno llamado vida y además de ello algo no muy mencionado, que es el desgaste de energía que solemos hacer con estas emociones evocadas una y otra vez hasta el agotamiento.

que cosa es lo que integramos?
lo que integramos es la experiencia vivida no a la coyuntura inmediata si no al fenomeno de la vida, al ser humano como ente ontológico, es decir al ser humano que es, cuya existencia de por sí ya es un fenómeno, o un milagro como suelen llamar las corrientes que proponen el optimismo como filosofía de vida y de la cual tengo mis reparos que más adelante exploraré.

un ejemplo de lo que digo es cuando en un trabajo nos sucede alguna injusticia, o pensamos que así ha sucedido: alguien recibe más sueldo que nosotros, alguien ocupa un cargo que nosotros deberíamos ocupar, alguien nos traiciona, alguien habla mal de nosotros, en fin un sin fin de situaciones más.
es allí donde conviene integrar, es algo parecido (por algo será), a lo que hacía el apostol san pablo: "colocarlo en manos de dios". en estos casos, si bien puede dar cólera, pena, frustración, impotencia, rabia, hasta miedo por nuestro futuro etc. de que puede servir rabiar una y otra vez?. tal vez lo único que logremos sea un desagradable dolor de cabeza, pero alguna solución a nuestro problema real?, ninguna.

si bien con integrar nuestra experiencia, o ver nuestra experiencia desde una perspectiva más amplia tal vez no solucione visiblemente nuestro problema, por lo menos no nos quedaremos atrapados a un problema emocional y miraremos hacia adelante para seguir viviendo y asombrarnos como nuestra propia existencia lo cual créanme es realmente mágico y porque no, divertido. "créanme", es sólo un decir, porque creo que todos ya lo sabemos sólo que tal vez no nos damos cuenta, lo cual ocurre con frecuencia.

por lo que quedarse atrapado en un problema emocional, evocarlo una y otra vez hasta el cansancio no es vivir con plenitud y es agregar mayor sufrimiento a nuestra vida, es agregar al sufrimiento inicial un plus , un extra, por consiguiente un mayor sufrimiento, lo cual desde luego no es para nada divertido. no me digan que para el masoquista sí, porque ese es otro rollo, y en el cual el masoquista busca el dolor pero para su propio placer, usualmente el erótico sexual.

integrar queda así asociado cuando es posible claro, a lo divertido.
no estoy diciendo que un sufrimiento real no merezca su duelo particular, un fallecimiento por ejemplo de un ser querido. cada sufrimiento debe tener su propio duelo, cada duelo nesecitará mayor o menor tiempo según la intensidad del sufrimiento, pero luego hay que seguir viviendo o será responsabilidad nuestra quedarnos atascados, anclados en ese sufrimiento porque la muerte es finalmente el sendero al cual todos los caminos confluyen.

ya seguiremos con más charla, hasta pronto.

2 comentarios:

  1. Es cierto lo que has contado. Creo que lo más difícil, después de apercatarse de estas verdades, es primero, tener la firme voluntad para ponerlas en práctica, y segundo, alcanzar la capacidad para realizarlas con éxito. Saludos y buena onda.

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  2. muchas gracias por tu valioso y generoso aporte amigo axius, ya seguiremos en estas buenas charlas zen. por cierto muy buenos tus blogs, ya los estaré comentando. hasta pronto, chau.

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